
Pistas inclinadas de grava
Las canchas de tierra batida inclinadas, también conocidas como “canchas de tierra batida inclinadas”, cuentan con una pendiente o superficie inclinada para drenar eficazmente el agua de lluvia. Esta construcción está destinada a evitar que el agua de lluvia se acumule en la superficie de la cancha, manteniéndola jugable incluso después de lluvias. A continuación se presentan algunas consideraciones importantes sobre las canchas de arcilla inclinadas.
Diseño de pendiente
El diseño de una cancha de arcilla inclinada generalmente incluye una pendiente suave desde el centro hacia los lados de la cancha. Esto asegura que el agua de lluvia se dirija hacia los lados y lejos del centro de la pista.
Mantenimiento
Debido a que las canchas de arcilla con pendiente son sensibles a la erosión, el mantenimiento regular es esencial. Esto incluye mantener la pendiente adecuada y garantizar que los desagües no se obstruyan.
Marcación de carril
Asegúrese de que las marcas del recorrido, incluidas las líneas y la red, tengan en cuenta el diseño de la pendiente para garantizar que sigan siendo correctas.
Reemplazo de grava
La grava en una pista inclinada puede desgastarse más rápido que en canchas planas de arcilla, especialmente en los lados donde se acumula el agua. Puede que sea necesario rellenar o reemplazar la grava periódicamente.
Seguridad
El diseño de un campo inclinado debe tener en cuenta la seguridad de los jugadores. La pendiente no debe ser demasiado pronunciada para evitar resbalones y no deben existir transiciones bruscas de una altura a otra.
Drenaje y Gestión del Agua
Las pistas de grava con pendiente pueden equiparse con un sistema de drenaje que ayude a drenar el agua. Este sistema puede consistir en tuberías de drenaje o tuberías perforadas debajo de la superficie de grava, que dirigen el agua a un punto de drenaje.
Barrido y trabajo de hojas.
Mantenga la pista libre de hojas, ramas y otros desechos. Esto no sólo mejora la jugabilidad, sino que también evita que se acumule material orgánico en la superficie.
Las canchas de grava con pendiente son una forma eficaz de garantizar que el agua de lluvia no cause daños a largo plazo a la cancha. El diseño y mantenimiento adecuados son cruciales para garantizar la jugabilidad y durabilidad de dichos campos.
